A un año y tres meses del accidente que privó de la vida a la gobernadora de Puebla, Martha Erika Alonso Hidalgo y su esposo el senador, Rafael Moreno Valle Rosas, las investigaciones concluyeron que el desplome de la aeronave se derivó por un error humano y no una falla mecánica.

En conferencia de prensa, el titular de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes, Javier Jiménez Espriu, presentó el resultado de las investigaciones realizadas sobre este accidente aéreo ocurrido el pasado 24 de diciembre de 2018.

Señaló que la causa del accidente fue la falla de los actuadores lineales del helicóptero que mantenían el equilibrio sumado a que el piloto no pudo recuperar la estabilidad después que se fue de lado la aeronave y esto provocó que se desplomara e impactará contra el suelo generando un incendio.

“Cuando fueron los dos actuadores, porque uno no servía y otro estaba fallando, en ese momento se va el helicóptero a un lado y el piloto automático deja de funcionar se va hacia un lado y ya no le dio tiempo al piloto, por lo que haya sido no sabemos, de recuperarlo porque tenía 3 segundos para hacerlo y pudo haber fallado por lo que sea”.

Reitero que se trata de un fatal accidente que pudo haberse evitado si se hubiera dado el mantenimiento correcto al helicóptero y en su momento cambiado el actuador lineal que previamente presentaba una falla.

“Falló estos dos asuntos que iban manteniendo el equilibrio y Alfa ya se fue el helicóptero de lado (…)  Es un accidente que se produce no sólo porque falló la máquina sino porque no se cumplieron los requisitos previos que debieron haber evitado el accidente porque si es el primer actuador lo cambian en su momento y queda bien no pasa nada”.

Jiménez Espriu señaló que la empresa que daba servicio al helicóptero y la proveedora de servicio de vuelo fueron multadas y están suspendidas para continuar operando.