Crónica reveló hace unos días la operación en gobiernos anteriores de más de 50 mil áreas de la administración pública federal dedicadas a realizar compras públicas sin mecanismos de control.

En las investigaciones de la Unidad de Inteligencia Financiera a empresas ganadoras de contratos, no habrá marcha atrás, aseguró a Crónica el presidente Andrés Manuel López Obrador, cuyo gobierno, dijo, sí busca crecimiento económico, pero no basado en la corrupción.

“No vamos a conceder tregua a la corrupción. Nada de que: ‘Se van a espantar los inversionistas, no hay un ambiente de confianza, hay que relajar la disciplina y que vuelvan a imperar las corruptelas. No queremos inversiones así. No nos ayuden, compadres”.

Crónica reveló hace unos días la operación en gobiernos anteriores de más de 50 mil áreas de la administración pública federal dedicadas a realizar compras públicas sin mecanismos de control. Para combatir tranzas, el Ejecutivo anunció indagatorias en torno a las compañías favorecidas en licitaciones, lo cual fue reprochado por Carlos Salazar, presidente del Consejo Coordinador Empresarial y por Antonio del Valle Perochena, del Consejo Mexicano de Negocios. Calificaron como “incongruente” el impulsar, por un lado, la Ley de Confianza Ciudadana para desaparecer inspectores y, por otro, anunciar pesquisas de la UIF.

“No podemos contratar una empresa que abusó, que cobró más de la cuenta, que dejó tirada una obra o se dedicó a litigar en contra del gobierno. Durante el neoliberalismo, se dedicaban nada más a lucrar”, justificó AMLO.

Y, como ejemplo, citó el tren México-Toluca -aún pendiente-, cuya inversión inicial de 30 mil millones creció a 90 mil millones. “¿Cómo vamos a contratar a las empresas que ganaron licitaciones con un determinado monto y les dieron el doble o triple?, ¿o a las que están acusadas de lavado de dinero? Por eso es lo de inteligencia financiera”.

-¿La intervención de la UIF es la única manera? -preguntó este diario.

-Entre otras cosas, y ya lo estamos haciendo, hubo licitaciones en el istmo, se hicieron investigaciones y se encontraron empresas que tienen malos antecedentes y no podemos otorgar permisos. No es un doble discurso. La Ley de Confianza Ciudadana es para que todos cumplamos con nuestra responsabilidad sin necesidad de ser fiscalizados.

IMPUESTOS Y EXHIBICIONES. Otra de las condiciones para los inversionistas es mantenerse al corriente en pago de impuestos, “porque había grandes empresas, grandototas, que hacían fraude fiscal y se sentían intocables. El neoliberal fue el periodo de las transas fiscales, el auge de los despachos fiscales, de cómo se burlaban de la hacienda pública, cómo la defraudaban con facturas falsas. Eso se termina, sea la empresa o banco que sea. Por eso el enojo que tienen”.

Hoy, además de clasificar la defraudación fiscal y el uso de facturas falsas como delitos graves, el presidente contempla exhibir a quienes incurran en estas faltas. “Ahora informamos, tengan cuidado, eso es delincuencia, puede ser de cuello blanco, exquisita, fifí, pero es corrupción, y es la que más daña al erario”.

Sí tendrán, aceptó, la posibilidad de concretar arreglos con el Servicio de Administración Tributaria y obtener agravantes, “siempre y cuando paguen; ya muchos lo están haciendo, fueron engañados con facturas falsas y se están regularizando, eso se acepta”.

Les pidió no confiarse en un posible triunfo a nivel judicial, en los tribunales, porque ya son otros tiempos.

“¿Por qué antes perdía el gobierno en los juzgados? Porque los mismos funcionarios se prestaban, no litigaban, dejaban pasar los careos, la presentación de pruebas, llegaban hasta la última instancia y ya era cosa juzgada. Todo por la corrupción de jueces y notarios. También se terminó”.

Con las pruebas o indicios obtenidos por la UIF de Santiago Nieto, el gobierno presentará denuncias ante las instancias correspondientes, “porque no seré tapadera de nadie. Nada de que: ‘soy una empresa extranjera y habrá presión de mi gobierno o me ayudará mi embajada’. No. Si hay fraude, no se permite”.

Los dos mensajes finales para los empresarios fueron: “pónganse al día” y: “¿vamos a tener crecimiento económico con corrupción? Así no”…